KENZO presenta el Eau de parfum Kenzo Homme Índigo, una obra maestra que se inspira en el azul índigo, un color emblemático que encapsula la esencia de Japón. Esta fragancia es parte de una colección que incluye dos nuevos perfumes, donde el índigo se convierte en un símbolo poderoso, representando tanto la historia como la moda japonesa. Este pigmento, extraído de las hojas de la planta del añil, ha sido utilizado desde tiempos ancestrales para teñir tejidos, comenzando por las vestimentas de guerreros y nobles, y evolucionando hasta convertirse en un elemento esencial del denim japonés, reconocido mundialmente.
El nuevo Eau de parfum Flower Índigo y el Eau de parfum Kenzo Homme Índigo son una fusión de las raíces japonesas de la marca, uniendo sus pilares femeninos y masculinos en un proyecto olfativo. Ambas fragancias comparten un ingrediente clave: el iris, conocido como el oro azul de la perfumería. Este ingrediente ha sido valorado no solo por su belleza, sino también por su complejidad y el tiempo que se requiere para cultivarlo y secarlo, lo que lo convierte en un símbolo de la riqueza olfativa.
El iris, junto al bambú, representa la masculinidad en Japón y su inclusión en la fragancia refleja la conexión entre la tradición y la modernidad. Kenzo Takada, el fundador de la Maison, siempre ha tenido una profunda admiración por las flores y su significado cultural. En una conversación con el diseñador Serge Mansau, Takada destacó que los símbolos de la masculinidad en Japón son el iris y el bambú, elementos que se celebran en el festival de la mayoría de edad de los jóvenes. Esta conexión se traduce en una fragancia que es tanto un homenaje a la cultura japonesa como una interpretación contemporánea.
Quentin Bisch, el perfumista detrás de Kenzo Homme Índigo, ha captado la esencia del iris para crear una fragancia que combina la frescura del acorde marino con la calidez y profundidad del iris. La fragancia se enriquece con notas amaderadas y almizcladas, creando una experiencia sensorial única. El uso del cuero en la base añade un toque de sensualidad, evocando la piel limpia y fresca. Esta interacción entre el iris y el cuero es una representación de la dualidad de la fragancia, que busca atraer y seducir.
El frasco de Kenzo Homme Índigo también es un elemento destacado. Su diseño biselado, inspirado en el bambú, y su nuevo lacado azul mate, evocan la profundidad del índigo. Este diseño no solo es visualmente impactante, sino que también refleja el compromiso de KENZO con la sostenibilidad. La fragancia se produce en Francia, utilizando un 95% de ingredientes de origen natural y un 100% de alcohol de campos franceses que promueven la agricultura regenerativa. Además, el frasco contiene un 15% de vidrio reciclado y su tapón un 30% de plástico reciclado, todo ello en consonancia con un enfoque medioambiental que busca un mundo más bello.
KENZO Homme Índigo no es solo una fragancia; es una declaración de intenciones que combina la tradición japonesa con la innovación moderna, ofreciendo una experiencia olfativa que celebra la masculinidad contemporánea. Esta nueva fragancia invita a los hombres a conectar con sus raíces mientras disfrutan de un producto que respeta el medio ambiente y la riqueza cultural de Japón.